Opinión personal

 

Permitidme que empiece la  reseña haciendo una crítica al premio que se llevó esta novela. Porque no necesita ese paripé: hay novelas malas, regulares, buenas, muy buenas, impresionantes y luego están las sublimes, como es El cártel.

Pero que presentándose con el seudónimo del protagonista de una de sus mejores obras (Frankie Machine) el jurado no sepa quién era, no se lo cree nadie. No sé si es que se piensan que los lectores somos gilipollas. Desde aquí os garantizo que no.

Winslow, diez años después de El poder del perro, retoma a sus dos protagonistas/antagonistas (Keller y Barrera) para escribir una obra que dedica a los ciento treinta periodistas asesinados en México.

Pero, además, con un estilo periodístico y muy cinematográfico, y escribiendo y describiendo de una manera atroz, brutal y bestial, hace la crónica de la «Guerra contra la Droga» que esos periodistas no pudieron hacer.

La hipocresía, la corrupción, la podredumbre y la inoperancia de los poderes políticos de Estados Unidos y Europa quedan perfectamente reflejados en esta crítica/denuncia en la que Winslow no deja títere con cabeza.

Durante su lectura he tenido que parar muchas veces para poder procesar todo lo que estaba leyendo. Pero no por la crueldad de algunos asesinatos, que cuando has leído tres te acostumbras y dejan de impresionarte, sino por todo el trasfondo que se vislumbra detrás.

México es un país podrido desde los cimientos por culpa del poder que tienen los cárteles y de todas las personas que trabajan para ellos. Todo el mundo es susceptible de ser comprado y los «capos de la droga» se aprovechan de ello.

Pero, además, son el verdadero estado, porque allí no se hace nada sin que ellos lo autoricen.

Varios cárteles poderosos (Sinaloa, Juárez, el Golfo, la Alianza de Sangre), con sus respectivos ejércitos, entran en guerra por el control de los «pasos» y de los «pisos».

Y vas leyendo y te das cuenta de que algunos te caen bien, porque son menos sanguinarios que otros, y piensas «¿me estoy volviendo loca? Que esto es la vida real, que no es ficción». Pero prefieres que la guerra la gane uno de ellos porque será la única manera que la paz llegue al país y dejen de morir decenas de personas cada día.

Y lees escenas como la del «maletín», la de «la boda» o la que sucede en Barcelona y te quieres morir diez veces. Porque a nadie le interesa acabar con el narcotráfico, porque supone un gran porcentaje del PIB de algunos países, porque con ese dinero se compran armas y se financian las contras, y que las personas inocentes que mueren son «daños colaterales» que no le importan a nadie.

Porque un antiguo ocupante de esa misma Casa Blanca autorizó en los años ochenta el acuerdo por el cual Tío traficaba con cocaína y entregaba dinero a las Contras anticomunistas, y nadie quiere que Adán Barrera saque ese esqueleto del armario y lo siente en el estrado).

 

Me ha sorprendido la gran cantidad de asesinatos que hubo diariamente en Juárez durante tiempo. ¿Por qué eso no salía en las noticias? Porque sí recuerdo ver imágenes de personas muertas alineadas en la calle.

Lo de Ayotzinapa (los estudiantes asesinados en Iguala) conmocionó al mundo, pero un año después nos hemos olvidado de esos cuarenta y tres asesinatos. Pero ellos fueron solamente una muestra de lo que está pasando allí.

Al poco tiempo de publicarse este libro en Estados Unidos, Guzmán se fugó de una prisión de máxima seguridad a través de un túnel ¡de kilómetro y medio!. Winslow piensa que lo hizo por la puerta. Yo, después de haber leído esta novela, creo que también, además de con banda de música y confeti.

El gobierno de Peña Nieto piensa que el Chapo es la menos mala entre todas las opciones y que con él la paz estará garantizada. Yo no opino lo mismo: creo que a este tío (y a los demás narcos) había que hacerles lo mismo que a la droga decomisada (por favor, déjenme echar la cerilla a mí).

Resumiendo, que dice el Maestro: una crónica magistral del mundo de los cárteles mexicanos, en la que he dudado hasta de mi marido (porque todos me parecían corruptos y al servicio de los narcos), y con un final apoteósico, que es pura y llanamente justicia poética.

Eso sí: su lectura te dejará física, mental, moral y emocionalmente agotado, porque sabes que lo que estás leyendo es la realidad ficcionada, pero en este caso, la primera supera a la ficción.

Un par de puntualizaciones: es recomendable leer El poder del perro y El cártel en orden, fundamentalmente porque ambas son dos novelazas. A los que leyeron hace años la primera parte, decirles que no es necesario releerla, porque al principio de la novela Winslow nos pone rápidamente al corriente.

Como me he perdido y he tenido que ir tomando notas al principio, porque me gusta tener controlados todos los nombres que aparecen, aunque sea un secundario que solamente sale una vez, os dejo un pequeño resumen de personajes y cárteles:

• Federación/Alianza de Sangre: Adán Barrera
• Cártel de Juárez: Vicente Fuentes
• Cártel del Golfo (CDG): Osiel Contreras y Salvador Herrera. Su ejército: los Zetas, comandados por Ochoa.
• Cártel de Tijuana: Elena Barrera
• Cártel de Sinaloa: Diego Tapia y hermanos
• Ciudades de paso: Tijuana, Juárez, Nuevo Laredo y Matamoros
• Familia: Michoacán

Después de esto, únicamente me queda deciros ¡vamos, que estáis tardando! Que son setecientas páginas que se os harán pocas, que las leeréis en un suspiro y que cuando terminéis el libro pensaréis «¿y ahora qué hago con mi vida?», porque Don Winslow se supera sin tener que reinventarse.

Por cierto, el precio que han puesto a la edición digital es el que deberían tener todos, porque así sí podemos permitirnos leer todo lo que queramos.

Os dejo una frase que resume el libro a la perfección:

… los asesinatos ya no son noticia. Noticia sería que no los hubiera.

Autor

 

Don Winslow nació en Nueva York (1953) pero creció en Perryville, Rhode Island. Don ha hecho muchas cosas antes de ser novelista: actor, director de cine, guía de safari… y ha trabajado como investigador privado en Londres, Nueva York y casi todo el territorio estadounidense. Asimismo, ha sido consultor para bufetes de abogados y compañías de seguros durante más de quince años.

Ha alcanzado la fama y la aclamación unánime de la crítica. En 1991 escribió su primera novela, Un soplo de aire fresco, perteneciente a una serie protagonizada por el detective privado Neal Carey.

Entre sus mejores obras cabe destacar Muerte y vida de Bobby Z, El invierno de Frankie Machine, El Club del Amanecer, la trilogía formada por Salvajes, Satori y Los reyes de lo cool y, sobre todo, el díptico formado por El poder del perro y El cártel (Premio RBA de Novela Negra 2015).

 

 

Datos del libro

 

 

Título	El cártel
Autor	Don Winslow
Editorial	RBA
Primera edición	1 octubre 2015
Serie	Art Keller

 

 

 

 

 

Esta reseña se publicó originalmente el 6 de octubre de 2015 en el blog Con el alma prendida a los libros (ya cerrado). Como no quiero perder las entradas ni las sensaciones que me dejaron las novelas reseñadas allí, la recupero en esta web sin moverle ni una coma.