Opinión personal
Me da una pereza infinita pasar por aquí con una reseña negativa, pero como tengo un rebote superlativo, aquí estoy para contaros lo que me ha parecido Hasta que caiga la luna de Sarah A. Parker, una novela que la editorial vende como (¡ojo cuidao, que se han venido un poquito arriba) «No habéis leído dragones como estos. Pasión magia, aventura y un amor que trasciende el tiempo». De esta grandilocuencia, la única parte que es cierta es la última. Y ahora paso a contaros por qué.
Pero no tienen bastante con eso que continúan: «Con un sistema mágico único (mentira), unos personajes impresionantes (tengo muchísimas dudas) y un mundo rico en matices y plagado de criaturas asombrosas (no se lo creen ni ellos jartitos de polvorones), Hasta que caiga la luna es una novela arrasadora (ja, ja y ja) y que está llamada a convertirse en una favorita de los lectores». Dadle una vuelta, queridos editores de Plaza, que se os ha ido un poquito la mano echando flores y a lo mejor se os estropea el jardín.
Pues lo de subir esta reseña lo hago por un motivo bastante simple: por muy bonito que sea su exterior, que yo no lo discuto, 25 euros es muchííííísimo dinero para gastarlo en un libro cuyo contenido no está a la altura de su continente (del que, como diré después, solo aprueba con notaza la traducción).
Hasta que caiga la luna promete una mezcla de elementos atractivos: dragones, magia elemental, tensiones políticas y un romance cargado de tensión. Sin embargo, aunque la premisa es interesante, su ejecución es desigual, especialmente si como yo lo que buscas es una historia profunda, con personajes ricos y un mundo coherente.
Pero la novela presenta problemas significativos en la construcción del mundo, el desarrollo de los personajes y el equilibrio de la trama, que la han terminado convirtiendo en una lectura bastante decepcionante.
Y eso teniendo en cuenta que mis expectativas bajaron al subsuelo cuando la añadí a Goodreads y vi que las dos primeras reseñas tenían un maravilloso DNF, así que mi frustración solo es culpa de Sarah A. Parker.
Hasta que caiga la luna sigue a Raeve, una asesina de élite de la rebelión Fíur du Ath. Impulsada por una sed de venganza personal, Raeve es una mujer pragmática y letal. Sin embargo, su misión toma un giro inesperado cuando se encuentra con Kaan Vaegor.
El conflicto central no solo radica en el enfrentamiento entre el imperio y la rebelión, sino también en las tensiones internas de los personajes protagonistas, que se ven obligados a trabajar juntos mientras luchan contra sus propios demonios.
La relación entre Raeve y Kaan intenta ser el eje emocional de la historia, pero el romance no logra alcanzar la profundidad necesaria para equilibrar la narrativa.
Vamos al lío, que es a lo que hemos venido:
¿Qué me ha gustado?
- El libro es el más bonito de todos los que han pasado por mis manos con los tacos pintados. Se nota que está muy currado.
- La traducción exquisita (hasta niveles estratosféricos) de Xavier Beltrán Palomino. Es una pena que al corrector se le hayan colado algunas comas de más, pero este libro, para ser de Plaza, está casi perfecto (ya sabéis lo mal que se publican, por ejemplo, los de Follett, que no tienen más faltas y erratas porque es materialmente imposible).
- La estructura en capítulos en los que se alterna el presente con un diario, que es lo que consigue mantener un poco el interés.
- El diario de Elluin, que sirve como una ventana a sus pensamientos más íntimos y conocemos todo lo que sucedió en el pasado. Es la parte más emocional de toda la novela.
- La historia de amor entre los dos protagonistas no me ha convencido del todo, pero sí cómo se han narrado los sentimientos de Kaan.
- Aunque lo mencionaré en los puntos negativos también (pero por otras razones), el epílogo es de los más atrayente de la novela: la forma de conectar dos personajes con otro y la utilización de la alondra me ha parecido muy buena. Por eso creo que las siguientes entregas de La caída lunar pueden superar a esta con creces.
¿Qué «me» ha fallado?
- El prólogo, en el que nos encontramos de pronto con un montón de información sobre los dioses. Y solo me ha quedado claro que había cinco y ahora hay cuatro.
- En cuanto a la estructura, que no haya aparecido más Kaan como narrador. Creo que hubiese dado muchísimo más juego a la trama. Además, este recurso podría haber añadido profundidad, pero en su lugar repite información o añade perspectivas redundantes
- Los temas principales son tropos de manual (que a mí no me molestan), pero no los ha utilizado bien:
- Venganza y redención: la venganza es el motor del viaje de Raeve, pero su camino hacia la redención no está suficientemente desarrollado. La novela apenas profundiza en cómo su venganza afecta su psique o sus relaciones. Y sus decisiones no son coherentes con su desarrollo emocional.
- Amor prohibido: el romance entre Raeve y Kaan intenta explorar cómo las emociones pueden desafiar lealtades y prejuicios, pero el desarrollo apresurado de su relación reduce el impacto emocional.
- Lucha por la libertad: el conflicto entre la rebelión y el imperio representa una lucha por la libertad frente a la tiranía, pero este tema se trata de manera superficial, sin explorar los matices del sistema político ni las motivaciones del imperio.
- La trama sigue una estructura clásica de misión heroica que culmina en un enfrentamiento final. Sin embargo, la ejecución es predecible y los conflictos principales se resuelven de manera poco impactante.
- Las dos tramas temporales, la presente y el diario. No ha aprovechado bien la oportunidad de explorar el pasado de los personajes o añadir capas de complejidad.
- El ritmo es muy irregular, con capítulos de acción trepidante seguidos por largas descripciones y momentos que no aportan a la trama principal; y no solo eso, hay párrafos y párrafos tediosos que dificultan que mantengamos el interés.
- Los giros argumentales son predecibles y no logran sorprender al lector. La resolución de los conflictos principales es apresurada.
- Hablando de conflictos, la facilidad con la que salen de apuros algunos de los personajes es para que la Parker se lo haga mirar. Solo hay que ver lo bien parada que sale Veya cuando se mete en… Hasta aquí puedo leer.
- Las descripciones, aunque a veces vívidas, son redundantes y ralentizan el ritmo de la lectura. Pero ni aquí ha conseguido convencerme. Hay muchísimas en las que no le falta un detalle a las torturas y, sin embargo, la que necesitamos vivir la despacha con una escena que a mí me ha resultado del todo insuficiente. Los lectores merecíamos ver sufrir a ese pedazo de hijo de los remil cabrones.
- Algunos diálogos son demasiado forzados y están cargados de frases melodramáticas que restan credibilidad a los personajes.
- Lo de las líneas rojas de las que habla al principio y al final es para abrirse las venas a bocaos. ¿En serio hay gente por ahí con la piel tan fina? Que es ficción, cojona bendita.
- El desarrollo de los personajes no me ha terminado de llenar, sobre todo el de los secundarios, que son meras comparsas para hacer avanzar la trama cuando a la autora le conviene.
- Principales:
- Raeve: protagonista y asesina de la rebelión. Su carácter fuerte y su determinación por vengarse la convierten en una figura intrigante al inicio (porque no hay nada que me guste más que un asesino justiciero). Aunque tiene momentos interesantes, su desarrollo emocional es inconsistente. Sus decisiones parecen más motivadas por las necesidades de la trama que por una evolución interna coherente, por lo que se arco argumental se siente bastante forzado en algunas ocasiones.
- Kaan Vaegor: aunque se presenta como un personaje lleno de matices, su historia personal y su conflicto interno no se desarrollan lo suficiente para convertirlo en un personaje memorable, aunque a mí es el que más me ha gustado.
- Secundarios clave:
- Veya: hermana de Kaan. Aunque su papel en la trama es menor, añade tensión en las dinámicas familiares y su influencia podría haber sido más significativa si se hubiese explorado su perspectiva o motivaciones.
- Rekk Zharos: un cazarrecompensas implacable contratado por el imperio para capturar a Raeve. Su intervención es un punto de inflexión en la trama. Aunque es un personaje interesante, su papel se limita a ser una amenaza temporal y no tiene un impacto duradero en la narrativa.
- Principales:
- En cuanto a la ambientación, el mundo que Parker intenta construir tiene potencial, pero falla en su ejecución:
- Dragones y magia elemental basada en los cuatro elementos: estos elementos suelen ser atractivos en la fantasía, pero a mí me han parecido infrautilizados y más decorativos que funcionales para la trama. Además, la falta de reglas claras y coherentes sobre cómo funciona esa magia deja muchas preguntas sin respuesta, debilitando la credibilidad del universo creado.
- Criaturas que aparecen y que sabemos qué hacen deduciéndolo por su nombre. Pero que, como la mayoría de las cosas en esta novela, no se explican. Aparecen cuando a la autora le conviene y le viene bien para que los personajes se metan o salgan de algún embrollo.
- Conflicto político: la rebelión y el imperio son descritos de manera simplista, sin explorar sus matices, lo que deja una sensación de superficialidad.
- Escenarios: las descripciones de paisajes y ciudades son genéricas y no logran sumergir al lector en el universo.
- Aunque entiendo que todo está inventado, he visto demasiadas similitudes con algunas sagas de fantasía romántica que he leído:
- Raeve guarda una clara semejanza con Celaena Sardothien, la protagonista de Trono de cristal, ya que ambas son asesinas con un pasado oscuro que se ven arrastradas a una lucha política mucho mayor. Pero el personaje de Celaena se apoya en una rica construcción del mundo y un desarrollo de personajes complejo, mientras Raeve carece de esa misma profundidad.
- Respecto al desenlace, es anticlimático. Como no había bastante frentes abiertos, se saca de la manga un epílogo para conectar a dos personajes con un mismo antagonista y dejar a los lectores no solo sin las tramas de este libro sin resolver, sino, además, abriendo más.
Resumiendo, que dice el Maestro: Hasta que caiga la luna tiene una premisa inicial bastante interesante y algunos momentos de acción emocionantes, pero está lastrada por problemas significativos en su ejecución. La trama predecible, la mayoría de los personajes inconsistentes y un mundo mal desarrollado hacen que me haya resultado una experiencia muy decepcionante.
¿Leeré el siguiente? Pues creo que sí, porque quiero pensar que Hasta que caiga la luna es una especie de presentación de la saga, y que en las siguientes entregas el worldbuilding estará mejor explicado, conoceremos más sobre el pasado de los personajes y cómo han llegado hasta aquí, los giros no se verán desde el tren, e irá cerrando tramas antes de ponerse a abrir más.
¿Que por qué a pesar de todo lo negativo le he dado un aprobado aunque justito? Pues no lo sé. Porque creo que, si las siguientes entregas las editan mejor y eliminan todo lo superfluo, se puede convertir en una gran saga. Y porque estamos casi en Navidad y me siento generosa.
Autor
Sarah A. Parker es una autora superventas internacional.
Se crio en una granja en Nueva Zelanda, donde pasaba los días deambulando entre los pastos, construyendo fuertes en la maleza, trepando árboles y explorando el bosque mientras imaginaba historias llenas de detalles que jamás la han abandonado.
Ahora vive en Australia con su marido, su perro, sus tres hijos e incontables plantas, y se dedica a volcar sus historias en papel. Su género predilecto es la fantasía romántica épica y se esfuerza por crear personajes reales y complejos y mundos absorbentes en los que puedas perderte.
Datos del libro
Título | Hasta que caiga la luna |
Autor | Sarah A. Parker |
Editorial | Plaza & Janés |
Primera edición | 28 noviembre 2024 |
Traducción | Xavier Beltrán Palomino |
Serie | La caída lunar |
Letraherida.
Creo que parte de mi amor a la vida se lo debo a mi amor a los libros.
Que ser valiente no salga tan caro, que ser cobarde no valga la pena.