Libelo de sangre

Sandra Aza

Libelo de sangre

 

 

Un doble y salvaje asesinato; un ritual hereje; una familia destrozada por la Inquisición. El Siglo de Oro como nunca te lo han contado.

Rigor, suspense y un estilo narrativo impecable se unen en Libelo de sangre.

Durante el crudo invierno de 1620 un espantoso crimen ha sembrado el pánico en cada rincón de Madrid: una joven ha sido violada y enterrada junto a un niño al que le han extirpado el corazón.

Nadie en la Villa duda de que se trata de un asesinato ritual, y pronto surge en los mentideros un «libelo de sangre» contra el escribano Sebastián Castro y su esposa, una acusación falsa que culpa a los judíos de sacrificar a menores cristianos para realizar magia negra.

Por suerte, Alonso, el hijo mayor del matrimonio, ha conseguido escapar de la Inquisición, encargada de investigar el delito, y de sus horribles métodos; pero ahora deberá enfrentarse a otros peligros no menos terribles: el frío, el hambre y a los miserables que pueblan las calles.

Devastado y sin más ayuda que la de dos pícaros vagabundos, intentará llevar a cabo el único objetivo que lo mantiene con vida: rescatar a sus padres.

Estirpe de sangre

 

 

Es la hora de restaurar el honor familiar. Es la hora de culminar la venganza.

Tras el auto de fe que lo ha dejado huérfano, Alonso acude a la Inclusa para recuperar a su hermano Diego, pero allí enfrenta la peor de las noticias cuando le comunican que el niño murió al poco de ingresar.

Roto de pena, se apoya en sus amigos Juan y Antonio, quienes le ayudan a superar esta nueva pérdida sumergiéndole en el duro pero fascinantemundo de la picaresca.

Una noche rescatan de un atraco a don Gonzalo Soto de Armendía, marqués de Velarde, quien los recompensa incorporándolos al servicio de su casa.

Este nuevo vuelco en la vida de Alonso le abrirá las puertas de otro Madrid muy distinto al que conoce, el de la aristocracia; le sumergirá en un sinfín de aventuras y desventuras; le pondrá en el camino a personas que marcarán su futuro y también su pasado, y, sobre todo, le brindará la oportunidad de consumar su venganza y al fin restaurar el honor de los Castro.