Aria Bacci

Empezó muy pequeñita escribiendo, en los diarios que le regalaba su madre. Con eso y con la pasión que le transmitió desde muy niña por los libros empezó la magia.

Primero fueron las poesías gracias a Bécquer. Durante su adolescencia, sin dejar de lado a la poesía empezó con lo que ahora conocemos como prosa poética que sigue escribiendo y subiendo a su página.

A contar historias empezó mucho más tarde durante el bachillerato para la asignatura de Literatura Contemporánea, pero ahí se quedó durante casi diez años, hasta que un día supo que quería contar y como, y surgió «A solas con mi pasado», una historia dura, que vivió en sus propias carnes y sentía la necesidad de contar y tras muchos años de depresión fue liberador.